El gato con botas y la ratita presumida. Celia Martínez.

Érase una vez una vez un gato, un gato con botas que tenia que salvar a una ratita para conseguir la medalla al caballero sin rencores. Pero la tarea de nuestro amigo Botas (que así se llamaba el gato), ni era fácil, pues allí en el país de los gatos no había ni ratitas ni ratones. Y el gato decidió marcharse al único sitio en la faz de la tierra que había una media mas alta de ratones que cualquier otra forma de vida, París .Su viaje duro 5 días y 5 noches y cuando por fin llegó a París escuchó,¡Socorro, socorro!.Botas fue corriendo hasta un casita llena de jarrones de porcelana y bonitos tapices de seda, que entre unas bonitas plantas con macetas de diseño, estaba la ratita presumida(a la que todos llamaban tita),envuelta en un capullo de seda que le envolvía de los pies a la cabeza. Y botas con su espada
En un segundo rompió el capullo y le dijo a Tita
-Hola, soy el gato con botas pero todos me llaman Botas, y te he salvado, ahora para mostrarme tu afecto me tienes que acompañar al país de los gatos, para que me den el emblema que me merezco.
-Vale-le respondió la ratita,-por cierto yo me llamo Tita- afirmó la ratita.
Por el camino el gato le contaba muchas anécdotas e historias a l ratita y cuando paraban para dormir estaban hasta las tantas contando historia y chistes. Caminaron un buen rato hasta caer la noche que pararon debajo de un viejo roble para descansar. Y a la
mañana siguiente volvieron a partir, y más o menos a la mitad del camino les apareció un búho, y les advirtió:
-Detrás del bosque de la mala hierba, hay un pequeño camino del que desemboca en el límite de París con el País de los Gatos. Pero cuidado que allí habita el monstruo de la vejez que con solo tocarte
te deja con solo 10 minutos de vida. La profecía dice que el que lo mate tendrá 3 deseos para cumplir-
El gato dijo que el quería ir al bosque para enfrentarse al monstruo, pero la ratita que le había cogido mucho cariño lo quería impedir, pero el gato que se había empeñado en enfrentarse al monstruo para tener mas mérito no le hizo caso. Siguieron su camino por los alrededores del bosque para ahorrar camino pero el gato se metió en una senda que daba a parar al bosque.
El gato y la ratita continuaron su trayecto por pequeño trozo que les quedaba dentro del bosque de la mala hierba. Hasta que vieron una pequeña luz.
-¡Es el final!-Exclamaron el gato y la ratita al unísono.
-Aquí es donde debe vivir el monstruo-Resaltó el gato.
-No por favor, no lo hagas-Le digo la ratita.

De repente apareció el monstruo de la nada y en cuanto vio al gato
empezó a reírse y a decir:
-Este es el que me tiene que matar a mí, este. Jejejejejejeje.-Se reía
el monstruo sin descanso pero Botas era mas duro de lo que parecía, cogió su espada y empezó a batallar con el monstruo. Botas cogió su espada e intentaba clavársela al monstruo en la espalda pero no le hacia nada mas que cosquillas, luego intento ahogarlo en el lago pero se bebió toda el agua. Estuvieron batallando durante horas, el monstruo tiraba al gato y el le cortaba en el dedo. Así durante días enteros hasta que el monstruo murió de agotamiento y calló encima de Tita.
Momentos después de lo ocurrido apareció el mago de los tres deseos y le digo al gato:
-Hola soy el mago Eusebio y desde a hace casi 15.000 años yo vivía aterrado por el monstruo de la vejez, y prometí que el ser que lo matara, recibiría como recompensa 3 deseos. Viéndote esa cara ya se que tu primer deseo será que salvar a tu amiga la ratita, ¿es o no cierto?-
-Sí-Le respondió el gato. Y de repente la ratita empezó a levantarse en el aire y a curarse de sus heridas mágicamente.
-Mi segundo deseo es volver a mi país con Tita para que me den mi emblema-Dijo el gato. Llegaron al país del gato en un “tres y no res”
Y le dieron el emblema al gato.
-Y mi tercer deseo es que Tita vuelva a París y que cada año me convierta en un ratón durante 1 mes para ir a verla-Dijo el gato.
La ratita se emocionó se despidió de su amigo botas y volvió a París.Y………cuento contado ya se ha acabado y si te has quedado con ganas de más lo siento pero ya ha terminado.