viernes, 31 de diciembre de 2010

Los tres cerditos. Vicente Budi


En el tercer piso de 13 Rue del Arenque vivían tres cerditos que eran hermanos. El acreedor siempre andaba persiguiéndoles para hacerles pagar el alquiler. Para escapar de él, los cerditos decidieron hacerse una casa en el bosque. El pequeño la hizo de paja, para acabar antes y poderse ir al bar.El mediano construyó una casita de “robín puro”. Al ver que su hermano pequeño había terminado ya, se dio prisa para irse al bar con él. El mayor trabajaba en su casa de cemento, iba paso a paso dibujaba los planos, preparaba material, mientras sus hermanos ya estaban cerrando bares.- Ya veréis lo que os embargará el acreedor con vuestras casas- riñó a sus hermanos mientras éstos se lo pasaban en grande.Pero el acreedor, siguiendo el rastro de las facturas sin cobrar los encontró cerca de sus casas, en el bar “Campos”. Los cerditos al verlo huyeron a sus casas. El pequeño entró en su casa de paja y para tranquilizarse se fumó un cigarrillo pero justo por eso la paja se quemó y murió.El segundo al tropezarse y golpearse con su casa de robín se hizo un corte que se llenó de “veneno amasao” y se murió también.El mayor había terminado su casa cuando vio al acreedor. Entró rápidamente en su casa y esperó allí viendo la tele, después de atrancar la puerta y bajar las persianas. El acreedor saltó lo plomos de la casa haciendo así que se apagara la tele y que saliera el cerdito. Al salir el cerdito, el acreedor le hizo pagar lo que debía de los alquileres.

2 comentarios:

  1. Hola soy Raúl Marín Gispert de 1ºF

    Me gusta tu historia por que has cambiado algunas cosas de la historia real,lo has contado diferente.
    A mi me gusta la expresión esa de "veneno amasao"

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  2. Hola. Soy Benjamín de 1ºG.

    Has llevado el cuento a nuestros días, cosa que me ha gustado, pero el final de los tres cerditos es muy cruel.

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